sábado, 25 de julio de 2009

¿Qué canal quieres mirar ... perdón... en qué mundo quieres vivir?


Los otros días entré a un comercio para comprar un producto que necesitaba, y cuando el comerciante me preguntó cómo estaba, le dije: “Muy bien”.

El hombre me respondió que “por fin alguien que dice que está bien. ¡Vio que está todo mal, está todo podrido!”. Le pregunté por qué decía eso, qué le hacía pensar de esa manera. “Y, ¿no vio la televisión? Es todo un desastre”.

Nos han hecho creer –nos quieren hacer creer– que la televisión y la realidad son la misma cosa.

Si la televisión, y sobre todo los noticieros, ocupan más de un 50 por ciento de su tiempo en asesinatos, violaciones, pestes y lo que podríamos llamar “la telenovela de las peleas entre políticos”, y si eso “es” la realidad, entonces créame que estamos en problemas.

NOS METEN BASURA TODO EL DIA...

Salimos de nuestras casas todas las mañanas “narcotizados” por los noticieros, las primeras planas de los diarios, los mensajes con que nos bombardean desde todos los rincones. Son los estímulos que recibe nuestra mente, que van configurando nuestra “imagen del mundo”.

Creemos que ese es el mundo. De hecho, ese “es” el mundo, ese es “nuestro” mundo. El que decidimos consumir.

Está allí afuera disponible para nosotros, gratis, en la televisión, en internet, en los carteles en la calle, en la radio. Hasta en las conversaciones con nuestros amigos y compañeros de trabajo.

Podemos decidir no consumirlo, podemos decidir no “aspirar” sus vapores. No podremos evitar del todo los efectos nocivos sobre nuestra mente, ni sus resultados distorsivos sobre nuestros pensamientos.

Pero podemos decidir la dosis. Y créame, cuanto más distancia tomemos de los “alucinógenos”, más lucidez iremos obteniendo para ver el mundo con nuestros propios ojos. Descubriremos el poder de nuestra mente para “crear” nuestro propio mundo.

Si usted quiere ser un empresario o un gerente exitoso, "O LO QUE QUIERA SER" usted debe decidir ver un mundo de personas talentosas, tanto dentro de su empresa como afuera.

Si usted decide verse rodeado de mediocres, créame que usted no logrará ser un empresario exitoso. Sencillamente no lo logrará.

Si usted es un empleado que dice querer hacer una exitosa carrera profesional, pero sólo logra ver barreras, obstáculos e impedimentos, créame que no llegará muy lejos.

Pero si usted ve desafíos, oportunidades y retos estimulantes, usted está en el rodaje de un próximo “éxito de pantalla”, y créame, usted tiene un papel protagónico.

El mundo no “es” de ningún modo en particular. No “es” ni el cielo ni el infierno. No “es” ni un lugar maravilloso ni un desastre. El mundo es, sencillamente, como nosotros lo vemos.

El mundo es tal como nosotros “decidimos” verlo.

Comienza a mirar el mundo tal como quieras verlo.

Comienza a crear tu propio mundo laboral y económico. Crea tu propio bienestar.

Hasta pronto y con el cariño de siempre....

Ernesto Forcade!..

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